Soledad
Postrado al suelo, mi cara; el llanto de mi voz
Hace eco por las planicies del silencio.
Postrado en el llanto desahogo
Y me encuentro oscuras catacumbas
Donde la mísera e inerte compañía
De la nada me orilla.
Pierdo el sabor del matutino cielo;
Olor a flores y rosales desvanecen
A vastedad de angustias.